Como parte del trabajo de defensoría y acompañamiento comunitario de ADES se realizó la socialización del informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el departamento de Cabañas 2020-2021. En la actividad hubo participación de las comunidades Santa marta, El Rodeo, Santa Lucia, Santa Rosa, El Junquillo.
El informe recoge datos del 2020 y 2021, periodo en el que “la Pandemia Covid-19 y el debilitamiento de la institucionalidad democrática en el país”, dejan al descubierto la vulneración a los derechos humanos principalmente al agua, salud alimentación, libertad y seguridad.
La actividad dio inicio con las palabras de Antonio Pacheco director ejecutivo de ADES, quien explicó como a través de la lucha en defensa del medio ambiente, comunidades de Cabañas se unieron para defender el territorio de la explotación minera, con el proyecto “El dorado” en el año 2009, fecha en la que fueron asesinados los líderes ambientalistas Marcelo Rivera, Ramiro Rivera y Dora Sorto.
Este hecho dio pauta para crear la “Unidad de la Defensoría del Pueblo” como una forma de dar un mejor acompañamiento jurídico y psicosocial ante agresiones o amenazas que enfrentan las comunidades a nivel colectivo e individual.
“La Defensoría del pueblo”, hizo su primer informe en 2011 y año con año se realiza una sistematización sobre los derechos humanos en el departamento de Cabañas.
Para este año, el informe abarca el periodo 2020 y 2021, posicionando la situación de los derechos humanos en el departamento Cabañas, Derechos individuales, Derechos económicos sociales y culturales, Derechos ambientales. A la vez aborda temas coyunturales como la entrada en vigor del Bitcoin como moneda de curso legal, persecución y desacredito a defensores y defensoras de derechos humanos, acompañamiento jurídico-legal a defensores y defensoras, atención a casos colectivos, acompañamiento a procesos administrativos y judiciales, conclusiones y recomendaciones.
Para ADES, acompañar a las comunidades y organizaciones comunitarias es vital importancia ya que a través de este tipo de informes se puede dar a conocer la vulneración a los derechos humanos que vive cada territorio, que hoy en día también sufre los efectos de la covid-19. Por eso el llamado es a seguir trabajando para alcanzar el bienestar de las comunidades.
Esta actividad contó con el apoyo solidario de Iglesia Unida de Canadá, la Diputación Foral de Bizkaia y la Agencia Catalana de Cooperación al Desarrollo (ACCD).
